Mar Pérez Alorda
Vamos a ponerla simple. Volvamos a los noventa, a los últimos tiempos de libertad donde lo único que importa es pasarlo bien, ¡party! ¡Fiesta! El mañana no existeDos jóvenes fusionarán sus caminos en la soleada Palma de Mallorca. Lo que los une, es algo con lo que algunaspersonas se sentirán identificadas: la droga, marihuana en este caso.Eva y Jonás comenzarán una relación laboral que, poco a poco, se transformará en un complicado y apasionado romance. Uno, que cambiará sus vidas para siempre.Sobre todo la de Jonás, que será arrastrado a un mundo de fantasía por culpa de Eva ¡culpable otra vez, por los siglos de los siglos! Dios también estará presente en cada una de las escenas. Resucitaremos la antigua parábola de Jonás y la ballena, quien esta vez adoptará la forma de unadespreocupada y traviesa chavalita.Es una historia multidimensional, ¡multisensorial! Una historia que sabe a ron, que suena a funk y que huele a humo. Muy calentita, picante vicios y virtudes se pelearán hasta la reconciliación.¡Además tenemos invitados increíbles! Invocamos a grandes artistas de todos los tiempos. Louis-Ferdinand Céline le hará la vida imposible al pobre Jonás. Bukowski, Kandinsky, Canova, Nietzsche y Salomé, entre otros.Rescataremos del olvido al verdadero Arte, el inmortal. Eva y sus visiones nos acercarán al fondo del proceso creativo. La imaginación, la inspiración y la Divinidad. ¡Y música! Ponte los cascos, cierra los ojos y escúchala. Déjatemetamorfosear. Déjame que te lleve a un viaje que, a lo mejor, te puede cambiar.
